GUATAVO ADOLFO BECQUER 17 octubre 2022
No sería un romántico si no dedicase un espacio al indiscutible rey del género, a Gustavo Adolfo Bécquer.
Nos acercamos al día de todos los santos y con el permiso de don Juan Tenorio y el Burlador de Sevilla, pensar en cementerios y jardines ocultos tras altos muros es impensable sin que vengan a nuestra mente poemas y relatos del señor Bécquer.
Malditos los colegios que obligaban a aprender de memoria sus poemas, aquellas golondrinas que siempre volvían, en lugar de enseñar a declamar sus magníficos versos. Enseñar a sentir el dolor de la perdida, la pasión del amor, el milagro de la vida que nos rodea.
Realmente no se si me lo aprendí de memoria, pero nunca desapareció de mi alma.
Dedicar estos renglones al maestro del romanticismo, no es un tópico, realmente sus versos tuvieron un fuerte impacto en mi vida, desde mi más tierna infancia. Antes que escritor fui poeta, con once años (1968) rematé un poema con estos versos más “gongorianos” que “becquerianos”:
Y así tu belleza es tanta y tan suprema,
que no hay dios de la antigua Grecia,
ni profeta, ni arcángel,
que ante ti no se deslumbre,
y en hermosura te alcance.
Si bien el poema más declamado de Bécquer es la rima 52 “volverán las oscuras golondrinas”, mi preferido siempre ha sido la rima 73 “cerraron sus ojos”.
Declamar a Bécquer es transportarse en el tiempo, dejar atrás las miserias de este mundo tecnológico y mezquino para acercarse a la realidad del ser humano.
Apaguen por un momento su IPad y abran un libro de poemas de don Gustavo… (Suspiro y al cielo miro) vale, olvídense de lo del libro, entren en san Google, busquen poemas de Bécquer y lean.


He tardado en hablar de Brown, y lo hago con prudencia, pero es innegable el talento para crear una saga de novelas de suspense que ha dado la vuelta al mundo y cuyo protagonista tiene el rostro de Tom Hank, porque nuevamente la literatura y la cinematografía se encuentran y entrelazan.
Y si conocemos bien a los personajes que se enredan en trepidantes historias inverosímiles, no tenemos tan claro quien es su autor Dan Brown, norteamericano de New Hampshire, nacido en 1964, es un tipo peculiar, músico antes que escritor. Estudió una temporada en España, tanto en Gijón, como en Sevilla. Triunfa mundialmente con el “Código Da Vinci”

Tarde o temprano le llegaría el turno a ROBIN COOK, para un escritor que lleva más de cuarenta años ejerciendo de enfermero en un hospital grande es imposible no haber caído en las redes de las intrigas que surgen de la pluma de un médico novelista.
Robin Cook nace en 1940 en Nueva York, escribe su primera novela en el 72, pero alcanza un éxito mundial en 1977 con “Coma” llevada al cine por otro médico y escritor, además de director de cine, Michael Crichton, y protagonizada por un joven Michael Douglas. La siguiente novela que publicó fue “La Esfinge”, también llevada al cine, en la que la intriga no tiene nada que ver con el mundo de la sanidad, ni las multinacionales farmacéuticas, como sería el caso de las innumerables obras exitosas que siguieron.


De nuevo continúo con uno de mis géneros favoritos al recomendarles hoy a Jack Higgins, maestro del thriller y de la novela de espionaje.
La obra de Higgins, ha sido llevada al cine en multitud de ocasiones, y el mismo ha ejercido de guionista.